La Linea discurre, en Pasajes, por un viaducto sobre bóvedas aligeradas por arcos transversales de hormigón y Mampostería. Las edificaciiones, bloques de viviendas de considerable altura, se han ido construyendo paralelas al trazado y a distancias poco menos que inverosímiles.
Por otra parte, se registraba una ocupación de bóvedas bajjo via, asi como de los exiguos espacios, a nivel de calle entre viaducto y manzanas de vivienda, con un resultado penoso, de dificil resolución.
El proyecto atacó lo problemas resueltamente, disponiendo el vestíbulo bajo las bóvedas. Esta disposición conlleva dificultades en distribución y circulación por el tamaño de las pilas y las pequeñas luces de los arcos.
El objetivo de aunar recorridos netos y diversificación de flujos o los andenes se logra a través de un espacio muy complejo que remite tanto a estructuras ferroviarias como a referencias casi piranesianas.
La disposición de ascensores y nuevas escaleras y sus correspondientes desembarcos a nivel de andenes obliga a una reconsideracion sobre la forma y dimensiones de los mismos y el desplazamiento de las agujas de entrada y salida, todo dentro del marco obligado de comodidad y segyridad para los viajeros y el intento permanente de limitar el impacto de las nuevas estructuras sobre la edificación circundante.
En el orden formal, se proyectó un frente de estación, a la plaza Biteri, centro del casco de Pasajes Ancho y un abrigo sobre el viaducto.
La antigua ocupación de bóvedas y arcos se reordena, consiguiendo unos soportales despejados, con ocupación parcial para actividades específicas regladas que, a más de conseguir un soportal rico, atiende a problemas de toda índole: ubicación de transformadores eléctricos, pasos peatonales entre manzanas, etc.
SUPERFICIE CONSTRUIDA